Las Elecciones en la Historia
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Después de la lucha de independencia siguió un proceso de organización que implico avances y retrocesos en la designación de autoridades. Fue derrotado el proyecto imperial, restaurada la república e implantados los procesos electorales.
Con la reelección de Sebastián Lerdo de Tejada en 1876, se inició un ciclo de golpes de estado, elecciones y reelecciones; que al final del camino hizo de Porfirio Díaz una figura que adquirió especial relevancia en la Nación.
El 11 de julio de 1904 México se enteró de que había elegido nuevamente a Porfirio Díaz, con 75 años de edad, para asumir la presidencia. A mediados de 1909 apareció el Club Central Anti-Reeleccionista -cuyo lema fue "Efectividad del Sufragio y No-Reelección"-. El 10 de julio de 1910 se realizaron elecciones en las que se reeligió una vez más a Porfirio Díaz. Refugiado en San Antonio, Texas, Francisco I. Madero, emitió un mensaje por el que declaró nulas las elecciones, desconoció al gobierno de Díaz, exigió sufragio efectivo y declaró el 20 de noviembre como el día del levantamiento en armas contra Porfirio Díaz lo que ocurrió hasta abril de 1911, cuando en varios lugares del país diversos grupos de orientación maderista tomaron plazas y ciudades.
El 6 de noviembre de 1911 fueron electos Madero y Pino Suárez obtuvieron la presidencia y vicepresidencia del país; el 19 de diciembre de ese año fue aprobada una ley electoral que otorgaba personalidad jurídica a los partidos y establecía el voto secreto. En septiembre de 1916 una nueva ley electoral impone un retroceso al establecer que el votante debía firmar la boleta electoral y expresar su nombre en voz alta a la mesa re-ceptora. La Constitución de 1917 no corrigió esta disposición y serán las reformas aprobadas el 2 de julio de 1918 las que establecerán el voto secreto.
Leyes Electorales y Actividad Política
En México las leyes electorales fueron reformadas y cambiadas en diversas ocasiones a través de los años, para adaptarlas a las condiciones cambiantes de la sociedad y adecuarlas a las tendencias internacionales (como el voto femenino); el reconocimiento como ciudadano a los 18 años, el acceso a la Cámara de Diputados a los 21 años y a la de Senadores a los 30 años, sin embargo, estas reformas no lograron la aceptación, transparencia y credibilidad que demanda el ejercicio del poder en un país que se dice democrático.
En 1977 la Secretaría de Gobernación convoca a los partidos políticos y organizaciones ciudadanas a participar en una consulta pública para llevar a cabo la Reforma Política para modificar las leyes y reglamentos que regulan la actividad política y electoral de México y se establecen modificaciones a favor de una mayor apertura y flexibilidad en el sistema de participación política; se crea la representación proporcional de los partidos en el Congreso, lo que permitirá la presencia equitativa de la oposición en la Cámara de Diputados. Son reconocidos los partidos políticos como "entidades de interés público", lo que les otorga el estatuto de institución de estado.
El Instituto Federal Electoral fue creado en 1990, dentro del marco jurídico del Código Federal de Instituciones y Pro¬cedimientos Electorales (Cofipe). Asimismo se establece que el Tribunal Federal Electoral será la instancia superior y definitiva en la resolución de las controversias de carácter electoral, y se crea la credencial de elector con fotografía, para ser utilizada también como documento oficial de identidad.
En 1993 fueron modificados algunos artículos de la Constitución con lo que se puso fin a la auto calificación para los procesos electorales que se efectuaba en el Congreso de la Unión erigido en Colegio Electoral y se establecieron mecanismos por los que el Instituto Federal Electoral y el Tribunal Federal Electoral pasaron a ser las instituciones responsables de ello. Se determinó que ningún partido político podrá obtener más de 315 diputados (en combinación de la mayoría relativa y representación proporcional, con lo cual, por principio, ningún partido podrá tener más de 63 por ciento de los votos en la Cámara).
Es reformada la Constitución una vez más en 1994 para establecer que el Instituto Federal Electoral es un organismo público autónomo, con participación de los ciudadanos, organizará las elecciones; la autoridad de ese organismo estará integrada a partir de consejeros ciudadanos designados por los poderes legislativo y ejecutivo y por representantes de los partidos políticos.
El Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, es el principal elemento de ordenación de las elecciones y los partidos políticos. A este Código lo complementa la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación en Materia Electoral, aprobada el 22 de noviembre de 1996.
Los Estados integrantes del pacto federal, crearon instituciones semejantes al IFE, reservándose ajustes correspondientes a su realidad local.
En el marco de la Reforma de Estado Convocada por el Congreso de la Unión en abril de 2007, se modificó una vez más al COFIPE.
Para ello, se efectuó una reforma constitucional que actuó con tres propósitos en esta reforma de tercera generación: el nuevo modelo de comunicación política; la reducción del financiamiento público a los partidos políticos, especial y drásticamente el de campaña; y el fortalecimiento de la autonomía y capacidades del Instituto Federal Electoral.
La propuesta de Cofipe desarrolla también otros aspectos novedosos cuyo objetivo es contribuir al fortalecimiento del sistema de partidos, al mejor ejercicio de sus derechos y al estricto cumplimiento de sus obligaciones, singularmente en lo que se refiere a la fiscalización de los recursos y gastos, tanto ordinarios como de campaña.
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