lunes, 18 de febrero de 2008

EL MES CRITICO DE MANLIO FABIO BELTRONES.

BELTRONES: EL FACTOR CLAVE DE LOS CAMBIOS CRUCIALES DEN EL PAÍS.
Por Adrián Camacho. TL.
Este mes de Febrero terminará siendo un mes clave en la historia reciente de México.
Dos pendientes de la agenda nacional tienen trabado al país en dos de sus áreas fundamentales: la economía y la democracia.
El segundo asunto señalado como traba estaba marcado por la dilación de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados para designar a los tres nuevos consejeros del IFE. Uno de los cuales tendría que ser el consejero Presidente del Instituto.
Trabada por la puja entre los partidos que manifestaron preferencias para que el nuevo presidente del consejo fuera algún personaje que ellos consideraban apropiado, la designación de los nuevos funcionarios electorales puso en riesgo el avance logrado para que la celebración de los comicios en nuestro país no pasara por episodios tan controvertidos y complejos en su solución como lo fue la divulgación primero y la legitimación después de los resultados de las elecciones de julio del 2006.
El acuerdo por fin llegó.
Y es reconocimiento general entre los principales actores políticos de México que el oficio del senador Manlio Fabio Beltrones Rivera tuvo una influencia decisiva para que se lograra el esperado acuerdo.
Hoy ya el IFE se encamina a retomar tanto credibilidad ante la sociedad, como operación eficiente ante el reto de organizar las elecciones federales intermedias del año próximo en las que se renovará la cámara de diputados federal.
El otro punto de la agenda pondrá a prueba toda la sapiencia política de Manlio Fabio Beltrones, así como sus conocidas dotes conciliadoras.
El debate por la reforma energética se ha llevado a niveles de discusión que sobredimensionan claramente los alcances que puede tener el proyecto de cambios constitucionales a la operación energética de México, específicamente la que se refiere al petróleo y sus formas de producción en México.
Nadie ha hablado de que PEMEX se va a privatizar y esa versión se ha convertido en bandera de nacionalistas de ocasión, de oportunistas que ven en ese debate su reposicionamiento político o de añejos personajes que quieren ver todavía a PEMEX como el símbolo de un México soberano que al igual que la mayoría de los países del mundo, vive ya de plano y en pleno la era de la globalización.
Beltrones Rivera ha tenido una participación relevante y eficiente en el accionar legislativo que está contribuyendo al rediseño que en muchos de sus sectores, políticos y económicos, sin olvidarse nunca de lo social en un país que padece la infamia de tener entre sus habitantes a millones de personas que viven en la extrema pobreza, demanda México con urgencia y en un ambiente de concordia.
El debate sobre la Reforma Energética no debe ser un elemento de división entre los mexicanos. Por el contrario, salvar la soberanía petrolera y energética sobre la base de una eficiencia y competitividad mundial en el sector, debe ser el resultado del debate que beneficie a México de una manera positiva, pero sobre todo a tiempo, antes de que sea demasiado tarde y las pugnas políticas barrocas nos vuelvan a poner en los último lugares de la modernización.
El senador Manlio Fabio Beltrones tendrá que operar con habilidad, consensos, pero sobre todo con mucha firmeza para que el debate sobre la Reforma Energética no se convierta en una derrota para las necesidades modernizadoras de México.

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