jueves, 26 de enero de 2012

HOSKIN KANRI: Estrategia Japonesa que se vincula a la operación de la Empresa.

El HOSHIN KANRI: La técnica japonesa para vincular la estrategia con la operación
Por: Manuel Francisco Suárez Barraza, Ph.D.

El Hoshin Kanri ofrece un proceso de planeación, ejecución y revisión paso a paso para dirigir el cambio. Específicamente, es un concepto sistemático de dirigir el cambio en los procesos críticos de los negocios.

1. Introducción

Cada día que pasa existe una clara necesidad en las PyMES mexicanas por iniciar un proceso de estrategia en su gestión cotidiana. Sólo a manera de ejemplo, el día 11 de diciembre de 2011 se vence el llamado “esquema de transición” del Acuerdo Comercial entre China y México; este hecho representará para México el ingreso de textiles, zapatos, juguetes y otros productos chinos que han puesto en jaque a la industria local desde el año 2005, a pesar de la protección de dicho esquema . El reto que tienen las PyMES de estos sectores es realmente preocupante ante la realidad que se avecina, es decir, la continua introducción de estos productos sin el acuerdo de protección. Visualizando la problemática de manera más profunda, las PyMES de México invierten prácticamente “nada” de su tiempo al tema de la estrategia, por lo tanto, el riesgo de desaparecer se duplica o triplica ante esta nueva amenaza de los mercados internacionales y su realidad interna.

Es más que claro que para poder hacer frente a esta competencia que en muchas ocasiones se puede tachar de “desleal” , es teniendo los costos de operación más bajos en la transformación de nuestros productos y/o servicios para poder tener precios más competitivos. Y la única manera de hacerlo es administrando nuestros recursos al máximo, por lo que las PyMES tendrán que pensar en un rumbo de bajo costo, en la que su operación se vincule de manera fácil y práctica con la planeación estratégica de su empresa. Finalmente, de acuerdo al profesor Robert Kaplan, el 40% de las empresas americanas fallan al momento de vincular la estrategia con la operación. Ya nos podremos imaginar lo que ocurre en México, y en sus PyMES, las pocas que tienen estrategia.

2. ¿Qué es el Hoshin Kanri?

Para comenzar la palabra Hoshin está relacionada con la palabra Heiho que viene de los ideogramas chinos que significan estrategia en su conjunto. Y como seguramente habrás escuchado, las artes marciales desarrolladas durante el período Tokugawa o la época de apogeo de los samurais en el Japón, el heiho era parte vital de sus planes de guerra. En la actualidad, el heiho quedó como descendencia en el arte marcial del Kendo (la esgrima con espadas de maderas). Muchos empresarios japoneses relacionan al heiho con el hoshin por su relación con el Kendo. En este sentido, volviendo al término propio de Hoshin, este se compone de dos ideogramas o Kanjis japoneses, el primero de ellos es “ho” que significa “método o forma” y el segundo de ellos es “sin” que significa “aguja o compás brillante”. Fusionándolo tenemos la palabra “Hoshin” que se puede entender como una metodología para poner en punto (o en compás) una dirección estratégica. La filosofía detrás del concepto tomado del kendo es que con pequeños pasos (pequeños objetivos) puedes escalar una gran montaña.

Como se puede visualizar el Hoshin Kanri, que por cierto Kanri significa “control o dirección”, representa el sistema que vuelve tangible o traduce de manera operativa la estrategia de la empresa, transformando en resultados los objetivos estratégicos fijados, a través de un despliegue de políticas. Siendo más exactos, recurriremos a Yoji Akao el principal autor de este tema para describir su definición, en la cual señala:

“El Hoshin Kanri ofrece un proceso de planeación, ejecución y revisión paso a paso para dirigir el cambio. Específicamente, es un concepto sistemático de dirigir el cambio en los procesos críticos de los negocios”.

En este sentido, las principales premisas del Hoshin Kanri son:
La visión, es decir, la imagen realista y creíble del futuro es la fuerza rectora de la planeación.
El talento creativo de una organización se capitaliza eficazmente a través de un proceso estructurado de equipos.
El proceso creativo requiere de ideas de todos los niveles de la organización.
La planeación debe ser hecha por quienes la van a instrumentar.
Las organizaciones sólo se pueden enfocar a un número reducido de objetivos de mejora y/o innovación de orden de dos como máximo al año.
Todas las demás actividades deben ser relegadas a la operación diaria.
El Kendo es un arte marcial que se práctica en el Japón que consiste en un combate de esgrima con un espada de madera o de bambú. Su práctica es generalmente obligatoria desde la educación básica y tiene como principios básicos el desarrollo de la disciplina y el pensamiento estratégico. Al respecto, Miyamoto Musahi en su libro a book of five rings de Overlock Press de 1982 señala: “Si esta plenamente familiarizado con una estrategia reconocerá las intenciones del enemigo y tendrá muchas oportunidades de ganar”.


Finalmente, existe un despliegue de los primeros objetivos estratégicos que se desarrollan como parte de la visión, en todas las áreas gerenciales y operativas de la empresa. Así pues, si se tiene un objetivo de mejora que puede hacer realidad la gerencia de ventas, esta área escribirá su propio objetivo de mejora, relacionado con el área de ventas, y así sucesivamente con las diferentes áreas que puedan conformar la gerencia. Como es claro, el siguiente nivel son los empleados, por lo que se recomienda designar un objetivo para el trabajador del área involucrado.

3. La Implementación, un ejemplo

Si partimos que una pequeña empresa de software mexicana aplicó el Hoshin Kanri en su gestión cotidiana, los beneficios que ha reportado han llegado hasta el 15% de reducción de costos de operación y el incremento en un 10% de sus ventas en los dos últimos años. Veamos el ejemplo de su aplicación:

VISIÓN:
Para el año 2020 ser parte de los cinco proveedores del mercado de Software para la micro empresa en la zona urbana de Toluca.

OBJETIVOS ESTRATÉGICOS OPERATIVOS:
Nivel Directivo: Penetrar en un 4% de participación de mercado del mercado actual en los primeros cinco años de la empresa.
Nivel Operativo (Gerencia de Venta): Incrementar al menos 20 clientes nuevos al año en la cartera de clientes.
Nivel Operativo (Empleados): Realizar una labor de ventas sin fallos y retrasos en un 90% al año.
OBJETIVOS ESTRATÉGICOS DE INNOVACIÓN:
Nivel Directivo: Organizar el trabajo en un enfoque de procesos con el 100% de los mismos al año.
Nivel Operativo (Gerencia de Operación): Formar equipos de innovación en los primeros dos meses de operación.
Nivel Operativo (Empleados): Participar con una idea de mejora al menos en dos reuniones del equipo de innovación.

El Hoshin Kanri es un instrumento sencillo de estrategia y alineación de la organización. Desde el dueño (director o gerente) de la Pyme hasta el último empleado de la misma. Sienta las bases para una gestión eficaz y eficiente, que cuando la pequeña empresa crezca estará lista para poder crecer de manera ordenada y organizada. Invito al lector a que inicie el tránsito por este camino de planeación e innovación.

Referencias
Tomado del artículo de América y Economía http://www.americaeconomia.com/economia-mercados/finanzas/mexico-en-alerta-por-termino-de-convenio-comercial-con-china Se ha señalado por parte de los empresarios mexicanos que los productos chinos sobretodo de ropa y textiles que han inundado a México de prendas que según los empresarios no cumplen con las normas de origen y que ingresan al país a precios extremadamente bajos, de unos 2.50 dólares; creando una competencia desleal. Sin embargo, recientemente, la Secretaría de Economía no encontró los elementos suficientes por parte de las empresas y la industria textil mexicana, que permitieran a la instancia acreditar la existencia de las prácticas desleales denunciadas como lo exige la legislación aplicable en el tema de la mezclilla que viene de China. De esta manera, no queda otra que mientras son “peras o son manzanas” referente a este tema, hay que prepararse

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